Historia y evolución de los cigarrillos electrónicos
Aunque la popularidad de los cigarrillos electrónicos sea muy reciente, podemos decir que hace ya mucho año hubo quienes comenzaron a pensar en ellos y registrar las primeras patentes. Si eres un amante de los cigarrillos electrónicos y el vapeo, seguro que te interesará este blog de SinHumo Sevilla. Así podrás conocer su historia y cómo han ido evolucionando hasta llegar a los distintos tipos de cigarrillos electrónicos que existen en la actualidad.
El primer cigarrillo electrónico
Herbert A. Gilbert fue el inventor del primer cigarrillo electrónico, que fue patentado en el año 1968.
Este primer dispositivo electrónico para fumar, funcionaba por aire aromatizado caliente, húmedo y con distintos sabores y, además, no tenía nicotina entre sus componentes. Era presentado por Gilbert como un objeto que no causaría daño en los dedos ni molestia para el usuario, y que proporcionaría “un medio seguro e inofensivo para fumar, sustituyendo la quema de tabaco y el papel por aire caliente, húmedo y aromatizado”.
Sin embargo, lo que puede parecer una invención muy importante en el mundo del vapeo, realmente en el momento fue un intento frustrado de revolucionar el sector de los cigarrillos. En aquel tiempo, fumar era tan común y bien aceptado en la sociedad, que hacerlo en cualquier lugar público era lo normal. Además, no era considerado peligroso para la salud de ninguna manera. Por ello, sus intentos de comercialización no funcionaron bien y este primer cigarrillo electrónico cayó en el olvido.
La invención de los cigarrillos electrónicos basados en nicotina
Así, pasaron muchos años hasta que el farmacéutico chino Hon Lik patentó el primer cigarrillo electrónico basado en nicotina. Este hecho se produjo en el año 2003, y esta vez sí que se empezaron a comercializar los cigarrillos tanto en el mercado chino como en el internacional.
El prototipo de Lik estaba equipado de un elemento eléctrico que operaba por ultrasonido. Era más grande y grueso que los diseños de vaporizadores más actuales, pero sin duda fue un punto de partida notable para el mundo de los cigarrillos electrónicos.
Mucho más sobre la evolución de los cigarrillos electrónicos
Aunque las invenciones de Gilbert y Hon Lik pueden considerarse las más significativas en el mundo del vapeo, fueron muchas las innovaciones que han ido teniendo lugar de en diferentes partes del mundo.
Sus orígenes, tras la indudable primera invención de Gilbert, se confunden entre otras numerosas patentes, inventores y empresas, sobre todo estadounidenses, que vieron la luz en los años 80 y a principios de los 90. En su mayoría, fueron empresas tabacaleras y farmacéuticas las que encontraron un claro potencial en este campo, bien por hacerse un hueco en el nuevo mercado o por ofrecer a las personas soluciones para dejar de fumar.
En el año 2001, la farmacéutica Alexza Pharmaceuticals empezó a comercializar el sistema Staccato, un producto para la vaporización e inhalación de medicamentos. Aunque su función y el motivo de su creación no está directamente relacionado con los cigarrillos electrónicos, la técnica en la que se basa sí que lo está, de ahí su relación en la evolución del vapeo.
De esta forma, el éxito de los cigarrillos electrónicos se ha ido propagando año tras año en muchos países, hasta ser lo que conocemos hoy en día: una alternativa a los cigarrillos tradicionales muy consolidada.
En la actualidad, la mayoría de los cigarrillos electrónicos que se comercializan se basan en una patente que les describía como dispositivos de configuración flexible y suave, cuyo objetivo era producir una sensación muy similar a la de los cigarrillos reales y que, a pesar de esa flexibilidad, fuera suficientemente resistente para proteger los componentes internos.
Por ello, aunque la historia y evolución de estos cigarrillos electrónicos puede considerarse un poco convulsa, de lo que no hay dudas es de que estos aparatos han llegado para quedarse, entre otras cosas porque ofrecen gran conveniencia, ahorran a sus consumidores una gran cantidad de dinero y brindan el mismo placer que los clientes acostumbraban con los cigarrillos tradicionales, pero sin los problemas que acarrea el fumar.
¡Desde SinHumo Sevilla esperamos que esta información te haya resultado muy interesante! Y por supuesto, no olvides contactar con nosotros si tienes cualquier duda.
pero sin los problemas que acarrea el fumar. Con esta frase cierras el escrito, pero los estudios en el mundo real muestran que no es así. El tabaco Vapeado y sus vehículos tienen un impacto en el árbol cardiovascular, el lecho pulmonar y si es usado por una embarazada puede acarrear retardo en el crecimiento del feto, daño cerebral y pulmonar y relacionado el síndrome de muerte subida en el bebe.
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